El Barcelona logró una victoria clave en Lisboa al imponerse 1-0 sobre el Benfica en el partido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones. A pesar de jugar con diez hombres desde el minuto 23 por la expulsión de Pau Cubarsí, el equipo de Xavi Hernández mostró resiliencia, orden defensivo y contundencia para llevarse el triunfo en una de las plazas más complicadas de Europa.
Un partido de alta intensidad desde el inicio
Desde el pitazo inicial, ambos equipos dejaron claro que querían la victoria. Apenas habían transcurrido 20 segundos cuando Wojciech Szczesny tuvo que intervenir con una gran atajada ante un disparo de Aktürkoglu. Esta acción marcó el tono del encuentro, en el que los dos guardametas jugaron un papel crucial para mantener a sus equipos en la pelea.
Con el paso de los minutos, el Benfica tomó la iniciativa y comenzó a presionar en campo rival. Sin embargo, el Barcelona, a pesar de la inferioridad numérica, se mantuvo firme en defensa y logró contener los ataques del conjunto portugués. Mientras tanto, los de Xavi Hernández aprovecharon cada oportunidad para generar peligro en el área rival.

Expulsión de Cubarsí y reacción del Barcelona
El partido dio un giro en el minuto 23, cuando el árbitro mostró la tarjeta roja a Cubarsí, dejando al Barcelona con diez jugadores. Esta situación parecía darle ventaja al Benfica, pero los catalanes no perdieron la compostura. En lugar de replegarse por completo, ajustaron su esquema y mantuvieron el control defensivo, impidiendo que los locales capitalizaran su superioridad numérica de inmediato.

A pesar de la presión del Benfica, el Barcelona supo administrar sus ataques y encontró su recompensa en el minuto 61. Raphinha aprovechó un error de Silva en la salida, recuperó el balón y sacó un potente disparo desde fuera del área que se coló en la esquina izquierda de la portería defendida por Trubin. Con esta acción, el brasileño desató la euforia en el banquillo culé y puso en ventaja a su equipo.

Szczesny, figura clave para mantener la ventaja
Tras el gol, el Benfica intensificó su ofensiva y volcó todo su esfuerzo en buscar el empate. Pavlidis, Schjelderup y Kokcu intentaron sorprender con remates peligrosos, pero Szczesny respondió con una actuación estelar. El arquero polaco realizó varias intervenciones decisivas y frustró cada intento del conjunto.

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