Por segundo día consecutivo, las enfermeras y enfermeros auxiliares de hospitales en Honduras mantienen una suspensión de labores y realizaron un plantón en Tegucigalpa para exigir el pago de salarios atrasados y otras demandas.
Las enfermeras han expresado sentirse ignoradas por las autoridades, tanto locales como nacionales, ya que no han recibido ninguna respuesta oficial hasta el momento.
La presidenta de la Asociación Nacional de Enfermeras y Enfermeros Auxiliares de Honduras (ANEAH) en el Hospital del Sur de Choluteca denunció que algunas trabajadoras han sido objeto de represalias.
Según señaló, la jefa de enfermería acusó a varias enfermeras de «traidoras al partido», y afirmó que el hospital ha sido politizado. Estas trabajadoras han sido asignadas a un «rol de emergencia» como medida de presión, una acción que la ANEAH considera una violación a los derechos laborales.
La presidenta de la ANEAH añadió que el ambiente en el hospital parece más el de una sede política que el de un centro de salud, ya que la administración prioriza intereses partidarios sobre el bienestar del personal y los pacientes.
También destacó que un desembolso de 12 millones de lempiras resolvería la situación a nivel nacional y evitaría que las enfermeras auxiliares sean sobrecargadas con labores que no les corresponden.
Las autoridades de salud aún no han dado una respuesta formal a las peticiones de las enfermeras, quienes advierten que continuarán con sus medidas de presión hasta obtener una solución satisfactoria.
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