El Real Madrid inició su camino en la UEFA Champions League 2025/26 con una victoria polémica y sufrida contra el Olympique de Marsella en el Santiago Bernabéu. El partido finalizó 2-1 a favor del equipo blanco, que logró remontar gracias a dos penales muy controversiales, desatando debates sobre la validez de las decisiones arbitrales.
El Marsella abrió el marcador temprano al minuto 22 con un gol de Timothy Weah que sorprendió a la afición madridista, poniendo en aviso al Real Madrid sobre la dificultad del duelo. Sin embargo, el equipo español no tardó en reaccionar y empató el marcador mediante un penalti señalado por el árbitro. Este primer penalti fue convertido por Mbappé con seguridad desde los 11 metros, igualando el encuentro.

Ya en la segunda mitad, con el partido en equilibrio y mucha tensión en el ambiente, el Real Madrid volvió a conseguir otro penalti polémico que generó un intenso debate. Esta oportunidad fue decisiva para inclinar la balanza a favor del conjunto madrileño, también Mbappé transformó el penalti para tomar la ventaja definitiva 2-1.

La polémica arbitral y la duda sobre la victoria
Lo más comentado del partido fue la forma en que se dio el segundo para el Real Madrid, que fue cuestionado por los expertos y aficionados. Ni el VAR intervino en la decisión de señalarlos, lo que ha generado aún más controversia en torno al arbitraje. Además, el partido estuvo marcado por la roja directa a Dani Carvajal debido a una agresión al portero del conjunto francés, quien había ingresado en sustitución del lesionado Trent Alexander-Arnold, complicando aún más el desarrollo para el conjunto blanco.
Varios medios deportivos han señalado que, pese a la polémica, el Real Madrid logró sumar tres puntos vitales en su grupo. Sin embargo, queda la duda sobre si el triunfo fue realmente merecido o si la suerte y las decisiones arbitrales fueron decisivas para conseguir la victoria en un partido que el Marsella opuso mucha resistencia.

Estadísticas y balance final
El Marsella dominó en algunos aspectos, como la posesión del balón (57% contra 43%) y también en el número total de pases (524 contra 402), aunque el Real Madrid generó más remates al arco (15) que su rival (5). El gasto físico y la presión blanca fueron evidentes con 28 tiros totales y 9 córners, pero la eficacia vino a través de los penales.
A pesar de la polémica arbitral, el equipo de Xabi Alonso consiguió arrancar la Champions con un triunfo que le permitirá encarar con confianza los próximos partidos, aunque con la sombra de las decisiones arbitrales y el debate sobre la justicia del resultado.
Esta victoria queda como un inicio intenso y disputado del Real Madrid en la máxima competición europea, un inicio que ya ha generado expectación no solo por el juego, sino por la controversia extradeportiva que acompañó el triunfo blanco.
Deja una respuesta